Esta casa adosada tradicional y esquinera está situada en una tranquila y bonita calle con vistas al campo y a las montañas. El terreno orientado al sur ofrece un jardín soleado con una gran piscina y varias terrazas excelentes, mientras la vivienda alberga tres dormitorios, dos baños y un amplio salón con una estufa de leña, además del comedor separado y la cocina que conecta con la terraza cubierta que da al jardín.
El inmueble, distribuido en dos plantas, tiene acceso desde dos calles y luce muchas características tradicionales como vigas de madera vistas y techos altos; el equipamiento incluye aire acondicionado en varias habitaciones, estufa de leña en el salón, paneles solares para agua caliente, calefacción por suelo radiante en los baños, un trastero o bodega y la posibilidad de aparcar en el propio terreno.
Apenas a un par de minutos a pie de varias panaderías, tiendas y cafés, este precioso domicilio tiene como vecinas directas a la naturaleza y la incomparable Serra de Tramuntana.
En Alaró palpita la vida tradicional de pueblo mallorquín, si bien con algunas influencias internacionales. Debido a su precioso entorno y su proximidad a las escuelas internacionales así como Palma, el pueblo está en alta demanda: a sólo 20 minutos de Palma, ofrece una vida social muy rica con muchos cafés, varios restaurantes y su mercado tradicional y muy visitado los sábados.
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